Pastores y líderes: ¡Qué maravilloso es transitar la vida ministerial con amigos!
Este año fortaleciste tu círculo íntimo y sumaste nuevas amistades en el camino. Pero: ¿Qué haremos con el capital relacional que hemos construido?
Hay amistades que marcan la vida. Sin embargo, en el liderazgo cristiano no debemos perder de vista que la amistad es un puente divino hacia algo mucho mayor: La misión compartida. El desafío no es solo caminar juntos, sino aprender a construir unidos. ¡Qué hermoso desafío dar el paso que transforma: "De la Amistad a la Misión"!
Cada etapa de esta travesía nos invita a mirar atrás con gratitud y adelante con estrategia. La conexión afectiva y sincera es el inicio, pero la visión del Reino demanda el siguiente paso: Activar la red. Debemos pasar del contacto pasivo a la colaboración estratégica. La prueba de una amistad ministerialmente inteligente no está en las palabras, sino en el fruto que produce.
El liderazgo en el Reino exige más que buenas intenciones: requiere trabajo en equipo, diversidad de dones y la valentía de sostenernos mutuamente. La unidad no es opcional, es mandato bíblico. Y cuando las amistades se convierten en alianzas, la eficiencia se multiplica, la visión se enriquece y la carga se reparte.
La realidad es que donde hay colaboración, también existe la fricción. Precisamente por eso, la inteligencia relacional se vuelve crucial para mantenernos unidos bajo presión. El enfoque nunca puede ser "tener la razón", sino honrar a Dios y avanzar en la misión, entendiendo que la unidad es más importante que cualquier diferencia personal.
Si este año te dejó nuevas personas en tu círculo, no las dejes como un contacto olvidado en WhatsApp. Es tiempo de aplicar la estrategia relacional:
- ¿Qué podemos hacer juntos que no podemos hacer separados?
- ¿A quiénes puedo conectar para impulsar su misión?
- ¿Qué debo cultivar para ser un mejor aliado?
La Palabra de Dios nos recuerda: “Mejor son dos que uno” (Eclesiastés 4:9-12). Es tiempo de transformar la amistad en alianza, de tejer una red de impacto. La unidad en el Espíritu no es solo una estrategia: es la presencia de Dios, la fuerza más poderosa para transformar el mundo.
Finalmente… Aquí estamos tú y yo, pastores y líderes. ¿Cuál será nuestra alianza estratégica para que logremos cosas increíbles?
Por Carlos Samuel Mansilla
Pastor principal de CASA BÍBLICA ARGENTINA
Instagram: @carlossamuelmansilla
www.carlossamuelmansilla.com
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* CUPEE - Consejo Unido de Pastores de Esteban Echeverría
* Socio Activo de Sociedad Bíblica Argentina
* Equipo Facilitador Nacional de ACIERA Niñez, Adolescencia y Familia.
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