La Beatlemanía y la ausencia del cristianismo en espacios claves de influencia ⎪ Por Carlos Samuel Mansilla
“Tengan ustedes en cuenta que los estoy enviando como a ovejas en medio de lobos; así que sean prudentes como serpientes y sencillos como palomas” (Mateo 10:16).
Cada 9 de febrero se cumple un nuevo aniversario de la llegada de "The Beatles" a Estados Unidos. Han pasado 60 años desde la primera presentación del grupo inglés en el famoso programa de televisión "The Ed Sullivan Show", que los catapultó a los escenarios mundiales. Gran cantidad de medios de todo el mundo relatan estos días la hazaña acontecida en aquel 1964. Estos días, La revista People ha titulado su artículo de la siguiente manera: "Una mirada retrospectiva a la actuación estelar de los Beatles en el Ed Sullivan Show en su 60º aniversario". (1).
Dos años después de aquel épico episodio, en marzo de 1966, el líder y fundador de la banda, John Lennon, realizó el siguiente comentario al periódico británico London Evening Standard, durante una entrevista con Maureen Cleave:
“El cristianismo se irá. Desaparecerá y se encogerá. No necesito discutir sobre eso, estoy seguro de que tengo razón. En este momento, somos más populares que Jesús. No sé qué se irá primero, si el rock and roll o el cristianismo…” (Ver artículo original: 1 y 2).
Este exabrupto provocó ofensas, protestas y quema de discos en muchos países. Hasta el día de hoy, esto sigue generando debates y controversias, sobre todo entre cristianos de todo el mundo. Sin embargo, es necesario abrir comillas y reflexionar sobre lo siguiente: “Las críticas deberían construir una serie de soluciones concretas, aportes pragmáticos y acciones prácticas para implantar la fe en la cultura”.
Taylor Barriguer escribió lo siguiente en su libro “La Iglesia Creativa”:
“Cuando salió la música rock, los comentarios que abundaban eran que esa música era satánica (…) así que decidimos no hacer música; con la televisión pasó lo mismo (…). Lo que eso ocasionó fue un vacío, que se produjo al retirarse la Iglesia de esos lugares, al no tener presencia ni en la radio, ni en la televisión, ni en las artes y tampoco en otras áreas de influencia. Pero ese vacío debía ser llenado. Como la Iglesia no estaba dispuesta a hacerlo, se encargó de llenarlo el mundo” (2).
Los Beatles no solo irrumpieron en la música, sino también en los medios audiovisuales de la época. Sin embargo, las críticas se dirigieron a la mala influencia del grupo británico, sin que los detractores se propusieran un plan de acción para llegar a tiempo y confrontar la revolución cultural que se estaba gestando. Es cierto que hay algunos ejemplos que contradicen esto, de hombres de Dios confrontando contraculturalmente la perversión, pero en realidad fueron excepciones que Dios permitió, incluso a pesar de la inmovilidad de muchos cristianos.
Los Beatles duraron pocos años, desde 1960 hasta su separación en 1970. John Lennon, quien hizo el comentario sobre el cristianismo, fue asesinado el 8 de diciembre de 1980. La verdad es que Cristo sigue reinando y el cristianismo, a través de sus seguidores, continúa esparciendo el Evangelio a toda criatura.
Por lo tanto, si tenemos en cuenta que Dios gobierna por sobre todo, más allá de cualquier fenómeno cultural que en cualquier época se haya impuesto, no solo deberíamos tener una crítica para ofrecer alternativas concretas ante el avance de la secularización, sino también la capacidad de "llegar antes".
El problema es "la ausencia histórica del cristianismo en espacios claves de influencia". Esta situación se puede enmendar fácilmente si nos encontramos haciendo lo que debemos hacer, siendo de impacto en cada espacio de misión y logrando efectos significativos en la sociedad. Dios nos envía "como a ovejas en medio de lobos" (Mateo 10:16), a lugares de influencia donde reinan las jaurías. Por eso, debemos ser estratégicos y "prudentes como serpientes y sencillos como palomas" (Mateo 10:16). Nuestro planeta está cargado de presiones, pero tenemos que tener confianza en Dios (Juan 16:33) y ser luz en medio de las tinieblas, sal en espacios insulsos, incluso entre personas como John Lennon, apáticas al evangelio.
No se trata de criticar el rock, la televisión, el cine u otros bienes culturales. Simplemente es un llamado de atención para que la Iglesia comience a conquistar espacios de gran valor simbólico en la sociedad. No se trata de actuar sin pensar, sino de usar la sabiduría del Evangelio para llegar a aquellos lugares donde el ruido del mundo ahoga la voz de Dios.
Afortunadamente, la Iglesia ha dado grandes pasos en este sentido en los últimos años, sin embargo, no debemos olvidar que la pasividad no es una opción. En un mundo que necesita con urgencia la luz del Evangelio y nuestra acción para generar efectos positivos en la sociedad, recordemos el mandato que nos moviliza a todos: “Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo” (Efesios 5:14).
(1) DeSantis, Rachel. “Looking Back on the Beatles’ Star-Making Ed Sullivan Performance on the 60th Anniversary.” People, Feb. 2024, people.com/remembering-beatles-ed-sullivan-performance-60th-anniversary-8575026.
(2) Barriger, Taylor. La Iglesia Creativa. e625, 2021, p. 62.